En un primer intento de hablar sobre la albañileria, escribí en mi otro blog "EL BLOG DE XAVIER VALDERAS LÓPEZ", en fecha del 29 de agosto de 2009, lo que a continuación inserto. (Para ver fotografías y videos, id a mi anterior blog). En este nuevo blog, seguiré hablando del tema. Claro que este artículo lo escribí antes de que creara el presente blog, pero es aquí el sitio donde debía estar y aquí os lo dejo:
sábado 29 de agosto de 2009
BREVE MANUAL DE ALBAÑILERÍA PARA INICIADOS
Desde hace más de 25 años, he estado trabajando en el sector de la construcción, empezando como peón, y adquiriendo los conocimientos y práctica de lo que comúnmente se conoce con la calificación de oficial de primera, aunque debo de añadir que este es un oficio del que siempre cada día es un reto y un trabajo nuevo, del que constantemente se debe de ir aprendiendo y perfeccionando o cambiando a por mejor lo ya aprendido. Se me ha ocurrido que debería de escribir un sencillo manual, cuya lectura fuera de utilidad para los iniciados, todo explicado desde la experiencia personal, y sin haber asistido a ninguna escuela ni haber tenido maestro alguno, puesto que en este oficio es raro que alguien diga haber tenido un maestro: se aprende con la observación y con la práctica, aunque a veces los consejos y lecciones de algún veterano ayudan, si bien como es natural, la envidia impide que el maestro transmita sus secretos al discípulo, por el miedo a que lo supere. De todos modos, personalmente he tratado de transmitir todos mis conocimientos, porque creo que una buena formación siempre acaba siendo de una gran utilidad para el interesado, y por eso a mis aprendices siempre les he exigido mucho trabajo y práctica, como la mejor manera de aprender ese oficio que ya se forma por sí mismo, con las peculiaridades particulares de cada uno. Mucho trabajo practicando, mucho interés y voluntad, y mucha aplicación, son las claves para aprender el oficio, muchísimo más que los cursos de los “institutos Gaudí de la construcción” de turnos con mucho contenido teórico y que requieren muchísimas horas, del que tan sólo terminan saliendo chapuceros inexpertos con un carnet oficial que el la práctica de muy poco sirve si no dispones de la pericia necesaria, cuyos conocimientos no se pueden comparar con los viejos veteranos de siempre que se conocen al dedillo toda una serie de trucos que no se enseñan en esos supuestos cursillos, que aunque con buenas intenciones, hasta ahora prácticamente han servido de muy poco. Trataré de explicar algo:
LECCIÓN 1.- NOCIONES BÁSICAS PARA CREAR UNA EMPRESA DE CONSTRUCCIÓN:
EL FACTOR HUMANO:
Hay que elegir bien el personal, puesto que esto es lo más importante de todo, ya que determina el éxito o fracaso en la empresa: a los jóvenes que se inician enseñarles todo lo posible y acostumbrarlos a trabajar bien, guardando el orden y la limpieza. Siendo ese un trabajo de gran dureza, que requiere gran resistencia física, es preciso ser persona lo bastante fuerte para aguantar el stress y el desgaste que de ello deriva. Es importante elegir bien a las personas, pues el resultado de una obra es la suma total de los trabajos que se hacen entre todos, teniendo en cuenta el importante detalle de que al ser muchas veces un trabajo de equipo, un operario tiene que ir forzosamente al ritmo del otro. Un paleta rápido y un peón lento, no forman una buena combinación; lo mismo que un peón rápido y un paleta lento. Como ocurre con el resto de las empresas del sistema, el trabajo se rige por la competitividad, y todo aquello que ayuda a ser competitivo, es positivo para la empresa, sea en rapidez del personal, ordenado y pulidez de la obra, buena formación profesional, dominio del oficio y buen aprovechamiento de las tecnologías y maquinaria, organización y planes a seguir, etc... Al mismo tiempo de conseguir el mayor beneficio económico posible para la empresa, hay que buscar la forma en que la obra confiada salga lo más barato posible al cliente, sin olvidar buscar la mejor calidad, al mismo tiempo que suponga la mayor ganancia económica para la empresa. Esto es un equilibrio muchas veces difícil de conseguir, pues la clave está en la rapidez, estrategia, y buena disposición del personal, que al ser equipo, conlleva las dificultades y los problemas propios de los que forman equipo. La cosa mejora en todos los aspectos si hay una buena parte de implicación individual. Elegir las personas para formar el equipo, es también asunto complicado y difícil: se tienen que ir probando personas, elegirlas o rechazarlas, contando también con el factor suerte de disponer de las personas adecuadas, pues no todas son responsables y mínimamente trabajadoras. Al fin y al cabo, la ganancia máxima, al mismo tiempo que la satisfacción del cliente, supone la finalidad última de la empresa. Eso es lo principal que debe de tener en cuenta quien tenga propósito de crear una empresa de construcción. Por esa razón, las empresas ya implantadas, buscan los mejores profesionales, tanto como personas, como de dominio del oficio; y los profesionales individuales (generalmente autónomos) no tienen demasiadas dificultades de oportunidades de trabajo en los tiempos de bonanza. Actualmente la crisis ha afectado muy gravemente al sector, que se encuentra bastante parado y con precios reventados, sobreviviendo los que sobresalen con la “ley del más fuerte” que lógicamente impone todo mercado.
Otra cuestión engorrosa, que debe de saberse, son las exigencias y obligaciones administrativas: el pago de los impuestos, el cumplimiento de supuestas normas de seguridad, los requisitos técnicos de las normativas, etc... (la inmensa mayoría de las veces no son ni justos, ni adecuados, ni rentables). Son cuestiones impuestas por una serie de señores de la cosa pública, que nunca han trabajado ni conocen bien lo que es estar días, meses y años trabajando en una obra,...y por eso muchas de esas cosas que imponen o exigen, son totalmente incompatibles, que cada cual trata de dar una imagen cara a la galería, y en cuanto puede, lógicamente lo burla, con toda la hipocresía que la cuestión representa. Pretendiendo buscar más seguridad, lo que se ha conseguido es más torpeza, pérdida inútil de tiempo, y un coste aún más carísimo. En mi opinión personal es de desear que esas exigencias desaparezcan en el futuro y se imponga el sentido común, y se dé libertad en el modo de trabajar, una libertad total que fomente la competencia y beneficie al consumidor-cliente, por permitir unos costes más reducidos y verdaderamente productivos. Para quien quiere ofrecer un buen servicio al cliente y que su empresa obtenga un buen prestigio social, no necesita que la burocrática Administración Pública le tenga que decir cómo tiene que hacer las cosas, y encima para empeorar aún más las cosas, imponerles fuertes tributos o tasas.
-Niveles y plomadas láser o electrónicas.
- Andamios: bastidas y tablones
- Furgonetas, coches-furgón, o camionetas
- Hormigoneras de diferente tamaño.
-Montacargas- grúas.
-Capazos-cubos y galledas
- Carretillas (carros colgantes y “chinos”).
- Palas, picos
-Escaleras
-Macetas, escarpas, punzones, piquetas.
-Lápices, marcadores, rotuladores, metros y cintas
- Martillos comprensores, taladros
-Depósitos para agua ( bidones ).
- Sierras
- Radiales
-Gafas protectoras
- Guantes
- Reglas de diferentes medidas y escuadras.
- Tenazas, destornilladores
-Plomos y niveles
- Protecciones
-Garbellas (cribas)
- Etc.., etc...
Conviene disponer de una parcela-almacén donde guardar todo. Claro que si se dispone de un almacén se puede obtener grandes cantidades de materiales más utilizados desde fábrica a precios más reducido, y ahorrando también costes de transportes que se aplican cuando los materiales se obtienen desde los distribuidores o negocios de venta de material de construcción.
EL MERCADO:
La clientela es la fuente que hace subsistir a la empresa: Pueden ser particulares que solicitan hacer obras. O la misma empresa se dedica a buscar y comprar los terrenos, encargar el diseño de una vivienda y construirla para posteriormente ponerla a la venta, ejerciendo en ese caso el papel de promotora.
Todo lo bien que se haga, todo en resumen contribuye mucho a hacer que la empresa adquiera prestigio. Como siempre la mejor publicidad es el boca a boca, aunque la publicidad en los medios de comunicación dan tan sólo testimonio de la existencia de la empresa. Siempre el "boca a boca" es la mejor propaganda, y es algo que se tiene que ganar día a día, con buenos trabajos y buenos servicios. Por eso es muy importante siempre aplicar los principios de honestidad, honradez, buen trabajo, buen servicio y buena calidad en los acabados.
La vivienda se comienza básicamente dando los siguientes pasos:
En una primera fase: construcción de los cimientos, levantamiento de las primeras paredes maestras-sostenidoras, construcción de forjados-pavimentos, levantamiento de las siguientes paredes maestras-sostenidoras, lo sucesivo en forjados-pavimentos, hasta llegar a la cubierta que puede ser en forma de tejado o terraza, con la consiguiente colocación de canales y tubos exteriores evacuadores de agua, chimeneas, colocación de aislantes, etc... Los materiales de aislamiento ayudan bastante, pero no lo son todo, de manera que a veces no se nota mucho que una vivienda quede aislada de frío o calor. La vivienda ideal donde la relación frío-calor queda más equilibrada es la que se construye con gruesas paredes de obra; por eso, por ejemplo, lo notamos en las construcciones antiguas, especialmente las iglesias. Estos tres pasos básicos de cimentar, levantar y cubrir, suelen hacerse bastante rápidos, y en Cataluña es costumbre colocar la bandera cuando se ha superado esta primera fase.
En una segunda fase, se pasan a hacer las paredes interiores empezando por los pisos superiores y bajando, colocando los bastimentos correspondientes a las puertas de cada habitación, fijadas a gusto del propietario, o bien distribuidas de la mejor manera dentro de las normas. A continuación se hacen las regatas para la circulación de tubos de electricidad, instalaciones de agua, de gas o de calefacción, o de paso de la conexión del internet, o las que llevan el cable conectado a la antena que lleva la señal de televisión. Se colocan las cajas y los tubos que han de llevar diversas funciones. A continuación empieza el enrayolado de las paredes verticales, básicamente de cocinas y cuartos de baño-wc, normalmente previo regresado de las paredes con mortero. Le siguen el enlucido de las paredes interiores, tanto sean de yeso como de mortero (que son los dos materiales básicos), y en fase final se hacen los pavimentos (el acabado del suelo). Huelga decir que, por ejemplo, la colocación de paredes de pladur es una de las novedades de los últimos años, que gana en rapidez, pero nada comparable a la forma tradicional que da más solidez al elemento constructivo. Debido a la gran atención en diversos detalles y al requerimiento de pericia, esta segunda fase suele ser mucho más lenta y hace más difícil prever su duración. Es la etapa que se eligen qué tipo de material interior se decido poner, de qué forma decorarlo. Hasta llegar a la fase final del terminado de la vivienda.
Se debe de empezar por abajo: aprender a preparar mortero es lo básico, pues el peón o aprendiz deberán primero saber preparar el material que une las partes constructivas (sobretodo las distintas clases de ladrillos), con la hormigonera, una de las herramientas básicas. Con el objeto de ahorrar en costos de material, hace unas décadas, se llenaban 6 partes de árido (arena o grava) por cada parte de cemento, para pasar luego a las 5 y hasta a veces 4 partes de árido por cada parte de cemento, que es en la actualidad. A más cemento, mayor calidad tiene el material, aunque menos de una cuarta parte de cemento, el mortero ya empieza a ser graso, con lo que empieza a perder cierta calidad de lo que confiere la mezcla. Por mi parte, como norma, aconsejo una parte de cemento Pórtland, por cuatro de arena. A partir de más de seis partes de arena, por una de cemento pórtland, la mezcla empieza a perder totalmente fuerza y calidad. El añadido de la cal, es para dar plasticidad al material, así como ciertas propiedades impermeables, aunque pierde dureza y fuerza de unir los materiales cerámicos. La técnica de preparar una buena mezcla con la máquina consiste en que primero se tira el agua, luego el portland, y a continuación el árido, siempre en la entrada de la hormigonera, no directamente al fondo de la hormigonera (eso hace que el cemento se pegue).De esta manera el batido de la hormigonera con el cemento y la arena queda mejor repartido interiormente.
Cuando se prepara el mortero a máquina, el líquido que se echa en el agua es para dar plasticidad al material (en este caso es un sustituto de la cal), y cuando más tiempo lleva mezclándose con la máquina, mejor se aprovechan sus efectos, aunque no es recomendable que esté más de 15 minutos con la máquina pasando la mezcla (bastan unos 10 minutos para considerar que la mezcla está en su mejor punto). El líquido, tiene el inconveniente de que hace que el mortero pierda algo de su dureza tras el fraguado, es decir, siempre quedará más duro un mortero sin líquido que uno con líquido, perdiendo una calidad de entre un 10 y un 20%, en comparación a la mezcla que se prepara sin echar líquido. La razón de echar líquido, es que la mezcla queda de una manera que se trabaja mejor, y tarda más en secarse, al mismo tiempo que adquiere ciertas propiedades impermeables que acompañan a la química del líquido.
Los hormigones, lo mismo que los morteros, cuanta menos agua, más duros y fuertes quedan, a más agua, más débiles (pero tienen que estar bien mezclados). Por eso para los encofrados, lo aconsejable es hormigón con poca agua, pero usando vibrador. El hormigón claro (con bastante agua), facilita el encofrado, formando una masa sólida, pero poco dura y fuerte (es decir, más frágil).
Los morteros muy claros, con mucha agua, producen esquerdas (pequeñas grietas), y lo mismo los muy grasos (con más cemento de la cuenta). En los enlucidos de las paredes, se debe remolinar cuando el mortero ya ha fraguado y secado un poco; si se remolina cuando todavía está blando o si se le pone una capa muy gruesa, se producen grietas. El escardellado, también tiene la función de evitar las grietas y una mejor cojida a la pared, por eso suele ser la capa previa al enlucido (extender y remolinar) de una pared con mortero.
Lo siguiente básico que deben de aprender los noveles de la construcción son los secretos de las plomadas y los niveles. Los antiguos usaban reglas y escuadras, pero en los tiempos modernos, ya existen las escuadras y niveles láser, que son más precisos y hacen ganar una cantidad enorme de tiempo. Así como también considero que es conviene tener algunos conocimientos de geometría, con lo cual les servirá para improvisar muchas soluciones, y estimular la creatividad y la imaginación, puesto que muchas veces la paletería requiere mucho de artista creativo. Mi consejo es que en la parte matemática, se aprenda toda la geometría básica posible, para poder entender los conceptos constructivos, aparte de dominar las cuatro nociones de aritmética que son precisas para el cálculo, lo mismo que la regla de tres. Con esa base de conocimientos básicos matemáticos, el resto es improvisación e iniciativa.
Hay que saber que en la construcción generalmente se suelen hacer las cosas bien aplomadas y niveladas, porque una gran mayoría de productos manufacturados: muebles, electrodomésticos, etc... vienen así. Pero para quienes quieran ser unos “chapuzas”, lo aconsejable es que se dediquen a la restauración de viviendas viejas o rusticas, donde predomina la imperfección de las formas. Aunque los inconvenientes de la restauración son unas tareas que producen mucho polvo, como los derribos, ya que los materiales de tiempos pasados suelen ser muy polvorientos, con los consiguientes riesgos de silicosis. En general ese es un oficio que se ensucia y se respira mucho el polvo, aunque en muchos casos suele ser al aire libre.
Los técnicos, que llaman aparejador, arquitecto, o inspector de seguridad, o otros nombres equivalentes, son tan sólo eso: “técnicos”, que generalmente han hecho un proyecto por ordenador sin gran esfuerzo (y que muchas veces es una simple copia de otros anteriores con algunos detalles alterados), y que tan sólo vienen a mirar, cuestionar o dar indicaciones,...pero para nada trabajar o involucrarse en la dureza del trabajo. Por eso suelen ser la pesadilla tanto de los encargados, como de los oficiales, y hasta el cliente mismo. Son gentes que suelen llevarse buenos sueldos, sin ser nada productivos, y que encarecen mucho las obras, impuestos por administración, a pesar de que presumen de ciertos conocimientos. Por eso, muy menudo, son muchos los clientes que sólo les piden que firmen los papeles, pero que no se acerquen a las obras, pues tan sólo su presencia de hacer tal observación, crítica o sugerencia, hacen perder el tiempo a los albañiles. El verdadero trabajador de las obras, es el que se ensucia de polvo, suda, y pone el esfuerzo, siendo por tanto, es el más maltratado y al mismo tiempo más ignorado por las exigencias legales. Por ejemplo, normalmente suele ocurrir que los técnicos exigen lo que aprenden en la universidad que son unas normas o indicaciones tres, cuatro, o más veces lo que realmente puede resistir una construcción, con el consiguiente encarecimiento de la obra. Y ese es un detalle que no debe de ignorarse por parte de los profanos en la materia, y una de las hipocresías existentes en el sector. No diré que no sean necesarios un arquitecto o un aparejador (que según qué cosas son muy necesarios para calcular y consultar), pero lo cierto es que los abusos que hay detrás de todo esto, no son necesariamente de utilidad, y que ciertos experimentados maestros albañiles son capaces de construir buenas viviendas sin necesidad de que se impliquen o involucren cualesquiera de los técnicos antes mencionados. Pues pensad que en tiempos pretéritos, aparejadores o arquitectos muchas veces eran también currantes que ponían las piedras o ladrillos en las obras, e igual se subían en andamios, o preparaban mortero y lo ponían en su sitio para unir elementos constructivos. Hoy en día esos facultativos son señores que vienen en las obras poniéndose un casco, llevando algún plano, tableta o portátil, y vestidos de informal (algunos incluso con traje y corbata), que para nada se manchan ni se implican en el duro esfuerzo de los albañiles, con lo cual inevitablemente muchos caen en lo de tocar los huevos a los albañiles, que bastante tienen con lo de dar forma a todas las construcciones. O sea que la varita mágica que crean las viviendas son los esfuerzos y sudores de los albañiles, no precisamente de esos facultativos que vienen bien vestidos y con el casco puesto en el breve tiempo que se dejan ver por ahí.
Por otra parte, las actuales normas de exigencias de seguridad e higiene, como por ejemplo: carnet de gruista o torero, son cosas más indicadas para gentes con preparación universitaria, totalmente ajenas a las que de verdad trabajan y ejecutan las obras, que generalmente suelen ser con bajo nivel educativo, pero con las ganas de trabajar, ya que de ello depende su supervivencia. A mi modesto entender, son discriminaciones que entorpecen y encarecen las obras, aparte de que aparentemente inútiles, salvo para los que se sacan un buen sueldo a costa de esas inutilidades (es decir, las escuelas donde imparten esas cosas para obtener esos dichosos carnet). A mi entender, lo ideal sería la libertad total de trabajo, sin normas ni exigencias, salvo las de perseguir un buen acabado, y la satisfacción total del cliente. Hace décadas, cualquier peón que tuviera destreza, manejaba una grúa, una máquina-toro, o una máquina retro, sin necesidad de ese carnet actual que exige un curso de muchísimas horas, y que no está al alcance de todos, sobretodo por aquellos que tienen responsabilidades familiares, tras la jornada laboral, que en la construcción acostumbra a ser más larga de lo legalmente permitido. De modo que anteriormente podía manejar ciertas máquinas cualquier persona que se viera capaz e indicada y así se hacia, aprovechando los talentos de cada uno; hoy día sólo es legal y consentido por alguien que puede ser un vago, incapaz e incompetente,...pero que tiene ese carnet que le confiere cierto privilegio personal,...otro añadido más al inútil encarecimiento de las obras y a la ineficacia, al no poder aprovechar los talentos de aquellos que lo disponen. Eso es una de las cosas que explica que décadas atrás, era posible que un particular se saliera en el riesgo de construirse una vivienda (y muchos se podían hacer su propia vivienda como simples aficionados); hoy en día, desgraciadamente la cosa lleva a endeudarse para toda la vida con una hipoteca casi a perpetuidad, cuando existen otras formas mejores de hacer las cosas y de abaratarlas, pero que el corrupto sistema burocrático lo ha empeorado todo al imponer más exigencias, normativas, carnets, etc.... El joven aprendiz debe de saber eso, y que a largo plazo se supone que ciertas normas y exigencias impuestas en los últimos años, deberían de abolirse y volver como mínimo a lo bien que estaban en tiempos pretéritos que conocen los albañiles jubilados de hoy día, porque de seguir como estamos, en muchos aspectos vamos a terminar mal, y con peores profesionales (no lo olvidemos), ya que en estas condiciones impuestas no se pueden aprovechar los talentos que aporta cada uno.
Para ello hace falta tener un muy importante dominio del nivel y de la plomada. La ventaja de la vivienda de obra vista, aparte que se la considera la mejor manera de embellecerla (después de la piedra natural) la vivienda resulta hecha de un material totalmente respirable, ya que la cerámica del ladrillo y el mortero en sí contienen una especie de poros que hacen respirable la vivienda, así como al mismo tiempo filtran humedad, que luego por igual razón pueden secar. La vivienda con paredes simplemente enlucidas de mortero, y luego pintadas, con el tiempo se ensucian por las agresiones atmosféricas dando una desagradable imagen de vivienda envejecida y manchada, haciendo necesaria una nueva capa de pintura, y con los gastos de nuevo pintado que ello supone. La obra vista, aunque en principio mucho más caro que la pared de mortero, perdura con el tiempo, y por si fuera poco, en el mercado existen productos químicos para su limpieza de agresiones atmosféricas.
Se coloca marcando los niveles (actualmente existen los niveles y aplomos láser, unas máquinas que van a pilas, y que sustituyen las viejas mangueras de marcar niveles y las tradicionales plomadas). Se calculan las hileras a colocar y el grosor de las juntas, que se marcan y se reparten en los reglas aplomados colocados en los extremos de las viviendas. También se pueden ir subiendo las hileras empleando nos simples tacos de madera a medida. Es muy importante colocar los ladrillos bien y en su medida exacta, ya que simples variaciones de milímetros desvían subiendo o bajando los niveles de las hileras, con lo cual lo mejor es calcular bien e ir marcando todas las hileras en los reglas de ambos extremos.
Se considera que un albañil ha alcanzado ya el grado de oficial, cuando sabe ejecutar correctamente una escalera. Aunque existe una norma DIN o UNE sobre la escalera, ciertos programas de ordenador, como el FoorPlan-Plus, sirven para diseño y proyecto de toda clase de elementos constructivos, acompañados por cientos y hasta miles de archivos de muestras que puedes tomar como básico para hacer manipulaciones constructivas por ordenador, y que puedes ver tanto en segunda dimensión (como un plano técnico), como en tercera dimensión (como un dibujo-fotografía). Por ejemplo, indicando la altura y la distancia al programa del ordenador, te da todas las alternativas posibles de escaleras, que una vez escogidas, se marcan por los lugares donde se apoyará o en una plantilla para acompañar, y se decide cómo y de qué medidas se hace la escalera. Por eso es importante tener cierto dominio de la informática a nivel de usuario, para aprovechar las ayudas que proporcionan esos programas informáticos, que para los profesionales ha de ser como una herramienta más, tanto de consulta como de aplicación, y no sólo al alcance de esos que se hacen llamar “técnicos” y que de verdaderos albañiles muy poco tienen.
LECCIÓN 6.- POR QUÉ SE PRODUCEN ESQUERDAS:
Es una pregunta que siempre me han hecho muchos particulares; es quizás siempre la pregunta más repetida que hacen los clientes. La causa de las esquerdas (grietas), que tanto afean y dan la sensación de rotura de la construcción se deben a causas varias:
- Haber remolinado o enlucido la pared con mortero demasiado graso (excesiva proporción de material, sea cemento o cal, con respeto al árido (arena).
- Haber colocado el mortero excesivamente claro (exceso de agua).
- No haber mojado suficientemente o haber mojado en exceso (negado de agua) los materiales cerámicos de colocación en la pared (tochana, gero, tabique).
- No tener ligamientos entre paredes o entre suelos y techos (en lo último -lo de arriba o abajo, con la base de hormigón o bovedilla, con hierros).
- Materiales demasiado cogidos y compactados (no hay que dejar cogidas demasiadas masas contructivas, ya que tienen efectos dilatadores, y terminan por romperse).
- La construcción está asentada sobre un terreno blando, que con el peso su cimiento se ha ido hundiendo, provocándose una rotura que se refleja en la esquerda.
- Errores de cálculo de arquitectos-aparejadores sobre la combinación adecuada de materiales (por ejemplo hormigón con hierro). Esos errores suelen ser demasiado frecuentes, a pesar de los años de estudios universitarios de esos técnicos.
LECCIÓN 7.- ALGUNAS CURIOSIDADES DE LA CONSTRUCCIÓN:
- Hubo ingenieros que idearon la construcción de módulos- colmenas de viviendas, básicamente de plástico, del tipo caravanas-roulette. Pero tienen el inconveniente que los materiales que no son de origen cerámico o de la tierra, suelen tener sustancias tóxicas. Eso son, por ejemplo, los barracones de las escuelas con exceso de plazas, como una solución provisional.
- En vez de aluminio, o plástico u otros materiales que se supone sería una solución rápida para resolver el problema de la vivienda, se sigue construyendo con piedra y ladrillo, así como hormigón, la explicación se da en que esos últimos son materiales que “respiran” y por ello son más naturales, siendo más aconsejable que una construcción sea de esos materiales, llamados de obra.
- El fraude es bastante extendido: se presupuesta, por ejemplo, una pared de pladur como si fuera de obra, con la enorme diferencia de precio que existe, lo mismo de la enorme diferencia de tiempo en la construcción. Otro caso sería que el proyecto indique, por ejemplo, la resistencia del hormigón, que precisa de 10 camiones de hormigón, combinados con gruesas piedras que se echan para dejar más compacto el cimiento, cuando con tan sólo 3 camiones y poniendo armadura, la resistencia sería la misma. Los listos se excusan con las exigencias técnicas del proyecto, que pueden ser las mismas de diferentes maneras, y por tanto de muy diferentes costes. Así que andad con cuidado con la picaresca que da gato por liebre. No obstante, existen muchísimas otras maneras de hacer fraude, y cuando más complicado todo, más posibilidad de fraude.
EPILOGO.- Actualmente estamos pasando por una cruda crisis en el sector: la falta de trabajo obliga a reventar precios, lo que actualmente no lo hace una profesión atractiva, por lo duro y los bajos sueldos. Pero como dice el refrán: “quien tiene un oficio, tiene una hacienda”. Desde luego es un trabajo durísimo, muy estresante, pero quien quiera trabajar de verdad, que aprenda, y en cuanto volvamos a salir del nefasto ciclo económico actual, y vuelvan tiempos de bonanzas, ...espero que los interesados podáis tener un buen medio para obtener beneficios económicos en el complicado sector del ladrillo, y que este pequeño manual personal os haya sido de alguna utilidad orientativa. Reconozco que este manual que acabo de escribir espontáneamente será totalmente incompleto y muchísimas cosas se han quedado sin explicar, pero sabed que podéis preguntarme todo lo que queráis sobre el tema, del que tendréis respuesta de mis 25 años de duro trabajo y experiencia en el sector. Quizás otro día me anime a escribir todo un tratado sobre la construcción, pero el problema es el de siempre: ¿de dónde saco las ganas y el tiempo?. Ese breve manual, tan sólo me ha llevado un día; tal vez cuando me jubile encuentre ese tiempo para elaborar ese gran manual que explicado todo desde la experiencia personal puedan servir a las nuevas generaciones en la noble tarea de hacer realidad los cobijos que necesitan las personas para vivir felices. La vivienda es un derecho de todos, y no tiene porque ser necesariamente cara.
Publicado por XAVIER VALDERAS LÓPEZ en su propio blog EL BLOG DE XAVIER VALDERAS LOPEZ, en fecha de 29 de agosto de 2009
Muy interesante. Hoy en día donde ninguna profesión puede garantizar una labor digna y estable, considero que capacitarse en un oficio como este es la mejor forma de encontrar solución rápida y efectiva al desempleo.
ResponderEliminarMuchas gracias por toda esta información, Xavier.
ResponderEliminarYo he trabajado de técnico en direcciones de obra y puedo corroborar lo que aquí comentas. Ahora estoy rehablitando la fachada de una masía y puedo asegurar que esto de la albañilería es todo un arte.
Toda una lección que a todo técnico le deberían enseñar en la universidad.
Gracias. JUAN
Yo también me dedico a lo tuyo, tengo 37 años y me parece muy bien hecho y muy loable todo lo que escribes, además de cierto en todos los campos (llevo más de 20 años de autónomo en esta profesión). Te agregaré a favoritos y me gustaría que ampliaras el manual, pues se lo haré leer anticipadamente a todo aquel que contrate, si es que consigo contratar a alguien algún dia por lo delicada de la situación actual como bien dices.
ResponderEliminarGracias por tus consejos y enhorabuena por el blog, oficio este, además, que no se enseña en ninguna escuela. JOSE MANUEL
Muchas gracias. Como podéis ver, poco a poco el blog se ha ido ampliando, y vuestros comentarios me animan a ello. Cordiales saludos.
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