Últimamente han aparecido novedades constructivas con otros materiales: U-glas (vidrio), plástico, aluminio, madera, etc…., pero se debe de saber que el mejor material sigue siendo la obra, es decir, de derivado cerámico o cementoso, pues todo lo demás acaba por deteriorarse y dejando esa belleza que se proponía, aparte de lo que provocan los factores atmosféricos, y los factores térmicos, que no hacen que aísle lo suficiente, y además que el edificio ni “respire” debidamente a través de esos otros materiales fuera de lo convencional.
Recordad siempre, el mejor material es la obra, y antes de que se inventara el ladrillo, se usaba la piedra, que sin duda alguna ha sido siempre el mejor de los materiales de construcción. Además los materiales de obra (es decir, de ladrillos cerámicos) tienen determinadas propiedades, como la porosidad (que hace que el edificio “respire” mejor), y las cualidades térmicas de aislamiento frío-calor, en comparación con el resto de los materiales. O sea, que son el material más “natural” para construirse una vivienda después de las piedras. Tenedlo presente en unos tiempos como los actuales que se habla mucho de “viviendas de diseño” y de novedades en materiales, que muchas veces son ajenos a los de derivados cerámicos-cementosos.
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