LA MAMPOSTERÍA

El montaje de los materiales de construcción (piedras, bloques, ladrillos, etc) implica unirlos unos con otros mediante el uso de yeso o mortero.

La colocación del yeso y el mortero, después de la mezcla, requiere la ayuda de otra variedad de paletas de hojas de diversas formas adaptadas a las diferentes situaciones. Cada una de ellas se presta a una utilización determinada, como la de “lengua de gato”, con una hoja estrecha con punta redondeada, para la realización de juntas entre las piedras y los bloques (que se puede hacer con un trozo de varilla de hierro a medida), o la paleta de juntas, con hoja estrecha, para juntas en cruz.

Las paletas también sirven para depositar el mortero o el yeso sobre los materiales de construcción a medida que se van elevando, como es el caso de la de albañil.

Mampostería

Por consiguiente, según se empleen los materiales citados, en albañilería puede distinguirse principalmente tres clases de construcciones: fábrica de ladrillo, mampostería y sillería. La primera se denomina así por emplearse como material de los ladrillos; se llama mampostería la obra en que el material empleado son piedras naturales no desbastadas, y sillería cuando las piedras que se emplean se han trabajado o desbastado por alguna de sus caras, formando ordinariamente grandes bloques de forma rectangular; se divide en mampostería desbastada y aplantillada; a cada uno de estos géneros de albañilería corresponden reglas y sistemas particulares para su acertada colocación.