EL CEMENTO

 Se debería hablar de cementos -en plural- ya que existen dos categorías: el natural y el artificial. El primer grupo comprende un cierto número de productos que se diferencian por su composición y resistencia.

 

El cemento es un componente de la pasta que mezclado con agua (con arena, a veces con cal para el mortero; o con arena y grava para el hormigón) forma una masa plástica y untuosa que se endurece rápidamente al secarse. Da una buena cohesión a las construcciones, generalmente es tiene bastante impermeablilidad y permite obtener una gran resistencia mecánica y química, superior a la de la cal, por ser más fuerte, y de capilaridad inferior. Es un material perfectamente adaptado a las tensiones impuestas por los edificios modernos, aunque mezclado con la cal se ablanda un poco, pero a cambio mejora las condiciones de flexibilidad y fluidez con todo lo que representa contra los ataques de dilatación.

 

El más conocido de los cementos es el portland artificial, cuyo nombre proviene de la isla de Portland, al sur de Inglaterra, en el Canal de la Mancha, de donde se extrae la roca caliza necesaria para su composición (o así fue cuando se descubrió en los años de la llamada "revolución industrial". El cemento es una mezcla de caliza, arcilla, hierro y magnesio (estos dos últimos en pequeñas cantidades). La diferencia entre el cemento artificial y el natural radica en la composición; en el primer caso la roca dominante es la caliza; en el segundo caso, es una mezcla con proporciones fijas, pero la proporción de caliza es la más importante. Cuando se descubrió en Portland, dio lugar al invento del hormigón armado (hormigón + hierro), que serviría para hacer las estructuras de los pisos, así como gran número de diversas construcciones moldeadas y encofradas, aunque fueran simples pilares de sostener puentes.

Las fábricas de cemento, normalmente, están instaladas en las proximidades de las canteras, para que los costes de transporte no agraven el precio de fabricación de este producto universalmente conocido.

 

Será inútil tratar aquí sobre los detalles de la construcción del cemento. Pero hay que saber que en todos los países avanzados existen criterios de normalización propios, con lo cual cada lugar lo fabrica a su manera. En Cataluña tenemos, por ejemplo, el cemento rápido (normalmente color marrón, cuando el portland suele ser gris), material que en otras regiones de España, apenas es utilizado. Y sin entrar en los detalles, sólo diré que para la fabricación del cemento, se empieza  haciendo que las rocas calizas empleadas para ese fin se trituren y se muelen en seco .De aquí se obtiene un polvo cuyos granos no sobrepasan el milímetro de espesor, y constituye lo que acabará siendo el cemento, que se llena en unos sacos, listos para transportar en destino (obra o negocio de venta de material de construcción). Indican los manuales sobre el tema, que esta mezcla tiene que cocerse a una temperatura aproximada de 1.450ºC: el producto obtenido de esta coción, se enfría y se reduce a polvo con una máquina para formar el cemento. Este es, muy resumido, el método de fabricación del cemento Portland artificial. Según los mismos principios, pero añadiéndole otros productos como cal, puzolana, etc, se obtienen los cementos derivados como el cemento de lechada, puzolana, de cenizas, etc. Estos diferentes materiales, perfectamente regidos por la normalización de cada país donde es producido y se vende, ofrecen calidades y niveles de resistencia diferentes, los cuales se encuentran indicados en los sacos, o en las etiquetas.

 

 El cemento español es bastante bueno, pero he visto cemento importado de Turquia, Grecia, o Yugoslavia, que no es de gran calidad que digamos, en comparación con el español, o el mexicano, los tipos de cemento que más se encuentran en el mercado español, y que dichos cementos portland de inferior calidad se conocen por esa agua amarillenta que se sube encima del material cuando se le deja un tiempo en reposo. Por otra parte, cada país tiene un historial de climatología diferente, lo que puede hacer que el cemento que fabrique contenga ciertos aditivos para evitar el secado demasiado rápido, ya que el calor, no sólo hace que el cemento se seque más rápido, sino que además el secado rápido hace que pierda ciertas propiedades de resistencia que lo vuelven más blando y con mayor posibilidad de deterioro anticipado

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En resumen, los cementos son producto de ciertas piedras arcillosas después de su calcinación; se secan rápidamente al aire libre formando una sustancia dura y mezclados con otra sustancia apropiada se endurecen también en el agua; también se llaman cementos en lo que se relacionan a la albañilería ciertas composiciones artificiales que tienen las mismas propiedades, y además a otras composiciones bituminosas que se emplean en albañilería con el mismo objeto. Un cemento que ha dado muy buenos resultados es el conocido con el nombre de Portland, como ya he indicado; se endurece más rápidamente que otros cementos, tiene mayor fuerza de cohesión y posee una gran fuerza de resistencia a la acción del agua. Uno de los cuidados que se requieren para la buena fabricación del mortero, consiste en limpiar bien la arena que se ha de mezclar con la cal; la arena del mar ofrece los inconvenientes de contener mezclas salinas y la de estar redondeada, siendo más eficaz que el que tenga una forma angulosa. Y otra cosa que hay que tener presente es evitar al máximo que el cemento esté en contacto con la piel, ya que la desgasta bastante.